El propio entrenador lo avisaba en la rueda de prensa del pasado martes. Marcelino lo dejaba caer entre líneas cuando le preguntaban por la competencia entre Rakitic y Trochowski, sobre quién de los dos debe ser el titular. "Lo que más me preocupa es que Rakitic esté lesionado. Yo tomo decisiones según la capacidad y el rendimiento que demuestre cada uno. Estamos ahí con la duda de qué pasará en un futuro cercano y eso sí que es un problema".
Y tanto que lo es. El centrocampista suizo-croata, que mientras el entrenador pronunciaba estas palabras se encontraba en la consulta del doctor Mikel Sánchez recibiendo infiltraciones de factores de crecimiento, no avanza en la evolución de la lesión que sufrió en Almería, la fractura del quinto metatarsiano de su pie derecho, lo que le obligó a pasar por el quirófano. Lo hizo, por petición del futbolista, en Croacia, donde se puso en manos de los médicos de la selección, profesionales que eran de su confianza y a los que visitó la pasada semana. El futbolista regresó contento y diciendo que en una semana estaría entrenándose, pero nada más lejos de la realidad. Los médicos del Sevilla que siguen su evolución han comprobado que no ha habido mejoría alguna y que, prácticamente, la formación del callo óseo se encuentra en el punto inicial después de que pasara por la intervención.
El Sevilla, con el doctor Juan José Jiménez a la cabeza, no descarta que Rakitic tenga que ser operado de nuevo, lo que en teoría retrasaría los plazos para su vuelta, pero no en la práctica, puesto que se está viendo que no existe apenas evolución. Para decidir sobre esta cuestión, hay que esperar dos semanas, el tiempo que debe pasar para ver si la infiltración de factores de crecimiento ha surtido el efecto esperado. Será el doctor Sánchez en Vitoria el que emita el informe tras el que valorará si Rakitic tiene que pasar por una nueva intervención.
El jugador ni siquiera ha podido calzarse las botas desde que el Sevilla llegó a Costa Ballena. La fractura del quinto metatarsiano es una lesión que suele dar mucho la lata a pesar de que, aparentemente, no es grave. Pero se trata de un hueso muy pequeñito que soporta todo el peso del cuerpo, con lo cual requiere un cuidado extremo, así como el conveniente fortalecimiento de la musculatura periférica. El argentino Salvio, que se lesionó un mes antes que Rakitic, ha recaído, y lo mismo le ha pasado al jugador del Cajasol de baloncesto Calloway. El propio Paco Gallardo, ex sevillista, avisaba en las páginas de este diario la semana pasada de lo que sufrió para volver a jugar.
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