Suele ser normal que los aficionados por esta época se ilusionen con los fichajes e incluso se sientan más atraídos por unos o por otros cuando los ven actuar en los primeros partidos amistosos. En este caso, el presente verano ha sido el de Piotr Trochowski. Al menos hasta el momento. Su movilidad, su agresividad, su constante dinamismo y su manera de distribuir el balón ha sido de lo más destacado del equipo de Marcelino, quien también se ha declarado maravillado por el internacional germano.
Y como buen alemán, aunque haya nacido en Polonia y su familia sea polaca -llegó con 5 años a Hamburgo- se siente atraído por el sol de España (prefiere hacer la entrevista en la terraza del hotel) y también por su fútbol, en su opinión más técnico que en la Bundesliga. Él habla de "a lot of toca, toca" mientras ríe abiertamente. "Para mí era un sueño jugar aquí. Yo jugaba en Alemania y veía por la televisión los partidos de la Liga española. Me gusta el fútbol que juegan los equipos españoles. Hay mucho toque y decidí que mi próximo reto iba a ser cambiar aquello por esto", explica un jugador que está siendo la sensación del verano y a quien los aficionados lo han adoptado como el fichaje preferido: "Es bonito oír eso. Yo estoy muy satisfecho de estar aquí, me encuentro muy bien y espero tener un buen rendimiento y conseguir buenos logros".
Su carácter abierto está siendo para él una gran ventaja a la hora de aprender el idioma, aunque puede decirse que habla y, sobre todo, entiende a la perfección. "Ahora estoy aprendiendo español. No es fácil para mí entender, porque hay muchos jugadores que hablan muy rápido, pero sólo llevo diez días aquí. Poco a poco entenderé más. Firmé en abril y entonces empecé a dar clases", recuerda.
En el Sevilla no se ha encontrado con nada nuevo. Ya lo había visto por la televisión y sabía que hay una gran plantilla. "Todos los jugadores me han sorprendido. Son muy diferentes a los de Alemania en general porque hay muy buena técnica. Ésa ha sido mi gran sorpresa. En la Bundesliga los jugadores son más fuertes", insiste, aparte de haber captado rápidamente cuál es el fuerte que tiene este equipo y qué es lo que hay que mejorar. "Hay mucha habilidad, mucha técnica. Es un buen equipo para jugar ofensivamente y si nosotros aprendemos a defender podemos ser un gran adversario. Tenemos que nivelar nuestro balance ataque-defensa. Si entrenamos mucho eso, como lo hemos hecho aquí, podemos hacernos respetar mucho".
Para eso Marcelino está poniendo las bases. Evitar lo que ocurrió la temporada pasada en defensa es el objetivo que se ha marcado el asturiano, para quien Trochowski tiene buenas palabras: "Me gusta jugar el fútbol que él piensa. Quiere que todos los jugadores defiendan, que todos los jugadores sepan qué tienen que hacer en cada posición. Él quiere que defendamos bien porque hay buenos jugadores arriba que pueden marcar muchos goles y por eso quiere que algunas veces hagamos mucho pressing y sorprendamos". Y ahí es donde entra su juego. La capacidad física del ex jugador del Hamburgo son las ideales para el juego que quiere desarrollar Marcelino. Presión, robo y velocidad. Para ello, ya ha dicho que puede utilizar a Trochowski en varias posiciones. "Por supuesto, prefiero jugar en el medio, donde he jugado estos días aquí, aunque en Alemania jugaba en la izquierda o en la derecha", asegura el alemán, quien recuerda el Mundial jugado en Sudáfrica como lo mejor que ha vivido en el fútbol. "Fue una gran experiencia que espero volver a vivir. Jugué contra España en la semifinal y fue increíble", asegura quien, pese a estar maravillado por el fútbol de toque de los Xavi, Iniesta, etcétera, no considera a España la mejor selección del mundo. "No creo que lo sea porque para eso necesita demostrar ese nivel en un periodo más largo de tiempo".
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